El expresidente brasileño Lula da Silva mantiene la incógnita sobre si será candidato a las elecciones presidenciales de Brasil en 2022, oponiéndose al saliente mandatario, Jair Bolsonaro. Sin embargo, el fundador del Partido de los Trabajadores está llevando a cabo una gira por Europa, reforzando su posición internacional con reuniones entre diplomáticos e inversores.
Luiz Inácio Lula da Silva fue recibido éste miércoles 17-11-2021 en el palacio del Elíseo por el presidente francés, Emmanuel Macron, uno más de los grandes líderes con los que se ha reunido o se reunirá en esta gira que parece marcar su retorno a la primera fila de la política internacional. En Alemania lo recibió el futuro canciller socialdemócrata, Olaf Scholz. En Madrid tiene previsto reunirse con el presidente socialista Pedro Sánchez.
Esta gira europea permite al exmandatario actualizar y reforzar sus vínculos internacionales, posicionándose como una figura política muy diferente a Jair Bolsonaro, mostrándose favorable al multilateralismo, pero manteniéndose muy vago en cuanto a su futuro electoral, que quedó abierto en marzo tras la anulación de las condenas por corrupción dictadas en su contra, llegando a pasar 18 meses en prisión.
“No sé si seré candidato [en las presidenciales de 2022], no he venido en busca de apoyos electorales”, ha dejado caer Lula en rueda de prensa, tras haber recibido, este miércoles, el prestigioso “Premio al Coraje Político” 2021 concedido por la revista especializada ‘Politique Internationale’. La publicación destacó la “ejemplar tenacidad” frente “a las persecuciones políticas y judiciales” de Lula, quien “encarna” la “esperanza” de los brasileños “decepcionados” con el actual presidente ultraderechista. Por el momento, el expresidente lidera los sondeos para los comicios de octubre de 2022.
Un gobierno de extrema derecha que ha posicionado en cargos civiles ejecutivos a más de 6.000 militares. El rol de la Fuerza Armada en las próximas elecciones brasileñas, con su posible preferencia por el excapitán del ejército Bolsonaro, es una gran incógnita.
RFI preguntó a Lula cómo cree que se comportarán los uniformados en octubre de 2022. “Yo no voy a hablar de las elecciones con los militares. Ellos tienen que comportarse como electores y no como militares en estos comicios”, dijo con vehemencia el exmandatario izquierdista. “Cuando haya ganado las elecciones, yo hablaré con ellos, en tanto que jefe supremo de las Fuerzas Armadas”, añadió, demostrando que, al menos en parte, sí proyecta su retorno a la jefatura del Estado brasileño.
Jair Bolsonaro ha estado en el centro de todas las intervenciones de Lula: le ha acusado de haber promovido una política económica desastrosa para los pobres, los trabajadores, el medioambiente y los derechos humanos, que él ve muy amenazados en Brasil.
En cuanto a la política internacional, Lula ha reclamado que se reforme el funcionamiento de Naciones Unidas, incluyendo en el Consejo de Seguridad de la ONU a más países latinoamericanos o africanos.
Respecto al acuerdo comercial firmado entre la Unión Europea y Mercosur, el expresidente considera que hay que rehacerlo por completo, porque se cerró de manera “precipitada”. “Hay que reunirse de nuevo alrededor de una mesa sin prejuicios, con la idea de hacer un acuerdo que pueda ser bueno”, agregó ante decenas de periodistas, franceses e internacionales.
Lula vuelve a Science Po
De apariencia en ocasiones cansado y con su característica voz ronca, Lula recobra el ardor, a sus 76 años y en pleno maratón mediático, cuando se lanza a hablar de cómo su legado político está siendo destruido por Bolsonaro. “Nadie quiere invertir en Brasil” ahora porque Bolsonaro “es grosero con las mujeres, no ama a los negros, quema la selva, porque es violento con el pueblo autóctono”, subrayó quien fuera presidente del Brasil entre 2003 y 2011, ante unos 400 estudiantes de la elitista universidad francesa Science Po de París este martes, a donde volvía tras haber sido nombrado doctor honoris causa en 2011.
En esta conferencia, el presidente del Partido de los Trabajadores pareció estar como pez en el agua, leyendo a ratos un discurso, a ratos improvisándolo, solo interrumpido por los vítores, los aplausos o las risas cómplices de un auditorio mayoritariamente entregado.
Ya en España, el jueves participará en el foro “Cooperación multilateral y recuperación regional post-covid 19” junto al ex presidente del gobierno español José Luis Rodríguez Zapatero y el actual canciller José Manuel Albares, entre otros.
Por| RDS| Fuente RFI.